El funcionario de política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, lamentó que no haya ninguna fuerza -incluido Estados Unidos- capaz de detener al primer ministro ocupante Benjamín Netanyahu en su guerra contra Gaza y el Líbano.
Borrell dijo a los periodistas mientras asistía ayer viernes a la Asamblea General de las Naciones Unidas que “lo que estamos haciendo es ejercer toda la presión diplomática para un alto el fuego, pero no parece que nadie tenga la capacidad de frenar a Netanyahu, ni en Gaza ni en el Cisjordania”.
Borrell apoyó la iniciativa de Francia y Estados Unidos de un alto el fuego de 21 días en el Líbano, que Israel ignoró mientras intensificaba sus ataques contra objetivos de Hezbollah.
Borrell dijo que Netanyahu tenía claro que los israelíes no se detendrían hasta que Hezbollah fuera destruido, tal como está sucediendo en la guerra de casi un año en Gaza contra Hamas.
Borrell añadió: “Si la explicación de la destrucción es la misma que ocurrió con Hamás, entonces vamos a una guerra larga”.
El jefe saliente de Asuntos Exteriores de la Unión Europea pidió una vez más diversificar los esfuerzos diplomáticos lejos de Estados Unidos, que había intentado en vano alcanzar una tregua en Gaza que incluiría la liberación de los detenidos.
Dijo que no se puede confiar solo en Estados Unidos en lo que respecta a un alto el fuego, porque lo intentó varias veces y no lo logró.
Y añadió: "No veo que esté dispuesto a iniciar un nuevo proceso de negociación que pueda conducir a otro Camp David", en referencia a las conversaciones que tuvieron lugar en el complejo presidencial estadounidense en 2000, en las que el ex presidente Bill Clinton buscaba En vano mediar en un acuerdo histórico para poner fin al conflicto palestino-israelí.
En un discurso ante las Naciones Unidas, ayer viernes, Netanyahu se comprometió a lograr los objetivos de Israel contra Hezbolá, que comenzó a lanzar ataques contra Israel tras el ataque de Hamás el 7 de octubre.
Desde el lunes, el ejército de ocupación israelí ha lanzado el ataque más violento y generalizado contra el Líbano desde que comenzaron los enfrentamientos con Hezbollah hace aproximadamente un año, matando a 726 personas e hiriendo a otras 2.173, mientras su guerra en Gaza continúa desde el 7 de octubre, dejando más de 137.000 muertos. Un mártir palestino y herido.